domingo, 20 de mayo de 2007

FILOSOFIA DE LA BANANA I



HABIA EN LA SELVA…

Dos ranas pequeñitas, a las cuales les gustaban los bananos, una de ellas decidió subir y subir hasta alcanzar alguno.

Al subir se quedo atorada entre dos ramas, y fue entonces cuando la segunda ranita decidió subir y ayudarla.

La primera saliendo de su aprieto gracias a la ayuda de la segunda, siguió trepando desde allí, sosteniéndose fuerte de cada ramita, mientras la segunda observaba desde debajo de ella, la primera llego a los bananos y la segunda le gritó:

-Solo uno we, solo bajate uno!

A lo que la primera contestó:

- Ni madres we!, yo me tumbo todo el racimo…

Y, así lo hizo, la primera rana se colgó del racimo de bananos*, este era enorme, se colocó debajo de este y empezó a jalar con todo su cuerpecito, jalando y jalando y jalando, hasta que en la selva solo se oyó…

-¡Ya nos llevo la chin…!-

Solo un ¡Plam¡ y un ¡Croacccwrrr! lastimoso, en la selva, y así las pend…ranitas, digo, las valientes ranitas nos dieron una lección la cual se llama: No hay que ser avariciosos porque nos puede llevar la chin....
FIN (de las dos ranitas)

*Racimo de Bananos. Este racimo pudo dar de comer a la familia de Ceferino Torres, mejor conocido como “El Gacho”, ¿podrían haber sido disfrutados por su pobre familia?, lo sabríamos siii existiera un hubiera, pero como en este caso esto es una mera lectura escrita por su servidora, por supuesto que existe un hubiera…Continuará…